miércoles, 14 de diciembre de 2011

Número diecinueve

De repente siento que me descontrolo. Y posteriormente viene la tragedia a sabotearme. Pero parece que si no hago imbecilidades jamás podré hacerlas en mi vida, a pesar de que no estarían prohibidas.

Parece que mis sentimientos están en calma.

1 comentario: